El Motivo De Grande Gozo

Dr. William Soto Santiago

Español (Idioma Original)

Cayey, Puerto Rico

08 de Agosto de 1982

Audio: .mp3

Versión: Página sencilla - Booklet

Páginas: 12 - 6
Tipo: PDF - Epub

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El Motivo De Grande Gozo

Rev. William Soto Santiago
08 de Agosto de 1982
Cayey, Puerto Rico

Muy buenos días para todos, amigos y hermanos aquí presentes, es para mí una grande bendición estar aquí con ustedes nuevamente para disfrutar de las ricas bendiciones de Dios en este lugar.

Hemos oído en esta mañana un gran mensaje que nos enseña algo muy importante que nunca debemos olvidar. Nos hemos gozado en este mensaje, y es motivo de gran gozo escuchar todas estas cosas, porque todas estas cosas son dadas a conocer a nosotros. Dios tiene leyes, y conforme a esas leyes es que Dios trabaja; y en cuanto a todo esto que nos habló nuestro hermano Miguel Bermúdez, todo esto es de acuerdo a las leyes de Dios.

O sea que usted puede ver que, de acuerdo a esas leyes, si usted actúa de una manera, entonces Dios va a actuar de una manera; si actúa de la otra, pues Dios actuará de la otra forma. O sea que para usted saber cómo Dios va a obrar con usted y con todas las cosas relacionadas a usted, usted lo sabe a través de la Palabra, porque Él le da a conocer Sus leyes y usted va a saber entonces cuáles van a ser los resultados de todo lo que Dios va a hacer con usted.

Y una cosa muy importante que nunca debemos dejar pasar por alto es que toda persona que ha de vivir por toda la eternidad, esa persona tiene su nombre escrito en el Cielo. Muchas personas no comprenden esto, pero lo han leído en la Biblia; han leído que en el Cielo hay un Libro, han escuchado las palabras del Señor Jesús en muchas ocasiones, por ejemplo, han escuchado estas palabras aquí del Señor del evangelio según San Lucas, cuando el Señor había enviado a los setenta discípulos de Él, los había enviado para predicar el Evangelio, orar por los enfermos, echar fuera demonios y todas estas cosas; y dice que ellos volviendo (los setenta volviendo) con gozo dijeron al Señor [San Lucas 10:17]:

“…Aun los demonios se nos sujetan en tu nombre.”

O sea, se sujetaban a la voluntad de ellos en el Nombre del Señor. Si ellos les decían: “Salgan,” esos demonios salían de las personas. Así que, estos discípulos del Señor vinieron muy contentos donde el Señor para contarle al Señor la victoria que habían tenido cumpliendo la orden del Señor de ir a predicar el Evangelio, y sanar a los enfermos y echar fuera los demonios.

Ahora encontramos que los discípulos pensaron que ese era el motivo más grande para estar contentos, pensaron que ese era el motivo más grande para estar regocijados; y el Señor les dice:

“Mas no os gocéis de esto, de que los espíritus se os sujetan, antes gozaos de que vuestros nombres están escritos en los cielos.”

El motivo de gran gozo es el que nombre esté escrito en el Cielo. Una persona puede hacer un sinnúmero de cosas grandes en la Tierra; puede ponerse muy contento, muy gozoso aquí en la Tierra, pero ese gozo es un gozo pasajero; pero cuando la persona sabe que su nombre está escrito en el Cielo, ese es el motivo del gran gozo que permanecerá para siempre. Porque saber que su nombre está escrito en el Cielo en el Libro de la Vida, es la cosa más grande que usted puede conocer.

Y usted me dirá: “¿Y cómo yo sabré que mi nombre está escrito allá en el Cielo?” Usted lo puede conocer de la manera más sencilla que usted se pueda imaginar. El Señor Jesucristo hablando acerca de las personas que tienen sus nombres escritos en el Cielo, Él las comparó con ovejas y Él dijo: “Mis ovejas oyen Mi voz y me siguen, y al extraño no seguirán, y no lo escucharán” Él también dijo: “Y Yo conozco a mis ovejas, y Yo las llamo por su nombre.” Muchas personas no comprenden lo que esto significa, quizás hay personas que piensen que esto es un mito; pero Él dijo que sería de esa manera.

Ahora, muchas veces muchas personas no entienden, no comprenden las cosas espirituales, y algunas veces Dios los está llamando por su nombre y ni lo saben. Muchas personas piensan que un llamado de esa clase es un llamado de acuerdo a la forma de pensar del individuo; pero no; más bien es un llamado divino de acuerdo al plan y propósito que Dios tiene con esas personas para ese tiempo en que están viviendo. Y cuando Dios los llama, es cuando Dios les da a conocer la Obra divina que está siendo llevada a cabo en ese tiempo en que viven esas personas. Y cuando esa persona escucha los planes y propósitos que Dios tenía determinado en ese tiempo en que él, esa persona está viviendo, cuando esa persona escucha todas esas cosas esa persona comienza a oír la Voz de Dios, la Voz de Dios para ese tiempo.

De nada le valdría a una persona oír un mensaje poderoso, pero todo relacionado al tiempo de Noé. Porque ese mensaje entonces lo que diría es: “Vamos a hacer un arca, porque Dios va a destruir este planeta Tierra o a la humanidad con un diluvio, y Dios ha dicho que hay que construir un arca.” Ese es un buen conocimiento, pero no para este tiempo; es un buen conocimiento, el cual fue útil para las personas que vivieron en el tiempo de Noé. Y las personas que escucharon ese mensaje estaban escuchando la Voz de Dios, la Voz de Dios que había sido colocada en la boca de Noé para transmitirle a la gente los planes y propósitos divinos que estarían desarrollándose en aquellos días.

Dios estuvo hablando, Dios estuvo revelando todos esos planes, estuvo mostrando los juicios divinos que habrían de venir, pero también estuvo mostrando en Su amor y misericordia la manera de escapar de esos juicios divinos.

Y los que escucharon el mensaje de Dios en labios de Noé, estuvieron oyendo el llamado del Señor, estuvieron siendo llamados por sus nombres en aquellos días; ellos entendieron en sus corazones que Dios era el que les estaba hablando, así también fue en el tiempo en que cada profeta enviado por Dios trajo su mensaje.

Por ejemplo, en el tiempo de Jesús de Nazaret Dios estuvo hablándole a la gente, estuvo llamando a las ovejas del Señor, a las ovejas del redil del Dios en aquellos días. Las estuvo llamando a través del mensaje correspondiente para aquel tiempo, y estuvieron respondiendo a aquel llamado; en algunas ocasiones malentendían algunas cosas, pero con todo y eso, estaban respondiendo al llamado de Dios. Esto nos enseña que, aunque en algunas ocasiones no entendamos muy bien algunas cosas, con todo y eso, hemos respondido al llamado de Dios.

Así que, las palabras que dijo el Señor Jesús a Pedro nuevamente son repetidas en nuestros oídos y en nuestro corazón cuando dijo: “Lo que no entiendes ahora, en el momento presente, lo entenderás después.” ¿Cómo es posible que usted vaya a entenderlo todo en un momento, cuando a Dios le ha tomado tanto tiempo preparar y desarrollar un plan tan grande como el que Él tiene en Su mente? Es imposible que usted lo pueda comprender todo en una hora, en dos horas, o en una semana, un mes o un año. Usted y yo tenemos que ir en una forma progresiva escuchando la Palabra de Dios a través de la cual Él nos muestra Su Programa divino, el cual ha estado desarrollando entre los seres humanos desde que colocó en la Tierra el primer ser humano que fue Adán.

Encontramos que la Biblia nos muestra una historia de amor, de Amor divino expresado hacia el ser humano. Muchas personas tienen una idea o imagen muy errada con relación a Dios, porque algunas personas piensan que Dios no ama lo suficiente para aceptarlo a usted tal y como es. Muchas veces algunas personas piensan que porque han cometido algún error, ya está todo perdido. No, usted debe comprender que su nombre está escrito en el Cielo, y eso le tiene que producir a usted un gozo tan grande que aun con todos sus problemas, aun con todas sus faltas, aun con todas sus debilidades, usted está registrado en el Cielo.

Muchos no comprenden que hay una gran ciudad, una gran ciudad celestial, una gran ciudad en el Cielo, y al no comprender esto, entonces no saben que pertenecen a esa gran ciudad. Pero es necesario que entendamos esto para que usted sepa que usted, así como tiene una ciudadanía terrenal del país donde usted nació, del país donde usted apareció como un hijo que nació en esta Tierra, usted también tiene su nombre registrado en el lugar donde se encuentra Su Padre celestial. Y al usted saber esto es entonces motivo de gran gozo, es motivo para usted estar siempre positivo en la vida. El ser humano tiene sus bajas y tiene sus altos, pero eso en ningún momento debe desanimarlo a usted en la vida; usted debe comprender que usted ha venido a vivir a este planeta Tierra con un propósito divino, el cual Dios está desarrollando en la vida suya; por eso es que usted necesita la ayuda divina para que así pueda ser cumplido el Plan divino en la vida suya.

Usted no apareció en esta Tierra por mera casualidad, usted está aquí con un propósito divino. Cuando usted comprende eso, entonces usted puede orar a Dios, pedirle ayuda a Dios para que Dios pueda fortalecerlo, para que Dios pueda guiarlo, y usted cumplir el propósito divino para el cual Dios lo ha traído a la existencia entre los seres humanos.

Muchas personas han pensado que el ser humano vino del mono; y últimamente por allá, por el Perú, me estaban diciendo algunas personas que habían algunos científicos que ya estaban descartando la idea de que había venido del mono y estaban diciendo ya que había venido del oso. Pero la Escritura dice que el hombre vino de Dios. Así que, no importa lo que la ciencia diga, Dios ha dicho que el hombre vino de Dios, y vino a imagen y semejanza de Dios.

Imagínese, si usted hubiera venido del mono o hubiera venido del oso, usted no tendría una mente para razonar, no tendría una mente para planificar las cosas de la vida, no tendría una mente para formar todas las cosas que pueden ser formadas en esta vida terrenal entre los seres humanos; o sea que el hombre no sería un ser progresivo.

Mire, todavía los monos siguen actuando de la misma manera, todavía los osos siguen actuando de la misma manera; y no han aprendido más de lo que sabían cien o doscientos años atrás, a menos que le hayan enseñado algo para que lo aprendan. ¿Y quiénes se lo han tratado de enseñar? Los seres humanos, que son los únicos que tienen la inteligencia, la sabiduría, porque han sido hechos a la imagen y semejanza de Dios. Y como Dios es todo sabio, como Dios es todo inteligencia, entonces lo más que se parece, lo más que se asemeja a Dios es el ser humano.

Y dice la Escritura que Dios tiene hijos. ¿Sabe usted lo que es descubrir? Porque no es que usted se puede hacer hijo de Dios así porque sí, es que usted descubre que Su Padre celestial, Su Padre eterno, es el Dios Todopoderoso, y que Él tiene registrado el nombre suyo en el record de Sus hijos. Y eso es realmente motivo de gran gozo: descubrir que su Padre es Dios realmente es motivo de regocijo. Saber que el nombre suyo esta allá en el Cielo, es realmente motivo de grande alegría.

¿Y qué significa todo eso? Significa que Dios siendo el dueño, el Creador de todo el Universo, usted es heredero de Dios y coheredero con Cristo Jesús. Todavía usted y yo no comprendemos con amplitud lo que todo eso significa, pero sabemos una cosa, y es: que todo lo que Dios ha creado es de los herederos, y usted siendo uno de los hijos de Dios, usted teniendo su nombre escrito en el Cielo, es heredero de una cosa que usted ni sabía; pero que usted y yo habremos de disfrutar por toda la eternidad.

Así que, es motivo de gran gozo saber que nuestro nombre está escrito en el Cielo, y también, siendo de gran gozo el saber esa cosa tan grande, también haremos todo lo que esté a nuestro alcance para darle a conocer a las demás personas que sus nombres también están escritos en el Cielo, y que Dios los llama en este tiempo final para que ocupen la posición en el Plan de Dios y para que puedan recibir la herencia que le corresponde.

Este es un tiempo muy grande, es un tiempo muy especial en el Programa divino, es un tiempo tan y tan grande que usted y yo no podemos perderlo. No podemos dejar pasar este tiempo, y tenemos que disfrutar todas las bendiciones que hay para todos nosotros. A medida que vayamos escuchando la Palabra de Dios, vamos entendiendo todo el plan de Dios; a medida que vamos escuchando la Palabra de Dios, vamos viendo todas las bendiciones que Dios tiene para Sus hijos, para todos los que están escritos en el Libro de la Vida que está en el Cielo. Es motivo de gran gozo saber que nuestros nombres están escritos en el Cielo; en cualquier otro lugar puede ser perdido el registro, pero en el Cielo está bien protegido.

Así que, nosotros sabiendo estas cosas, tenemos que siempre estar en la vida positivos, sabiendo que todas las cosas obrarán para bien, sabiendo que Dios está desarrollando un plan, y que nosotros somos parte de ese plan. Y que lo que sufrimos en esta Tierra no es de comparar con las glorias venideras. Cuando pasamos por etapas difíciles miramos las grandes bendiciones que han de venir para que las disfrutemos; miramos también hacia el Cielo y reconocemos que nuestro nombre está escrito en el Libro de la Vida y eso nos da ánimo, nos da fortaleza, y decimos: “Todas las cosas obrarán para bien, y no es de comparar lo que sufro aquí en la Tierra con lo que gozaré por toda la eternidad; porque mi nombre está escrito en el Cielo.” Y el Señor Jesús dijo: “Gócense de que sus nombres están escritos en el Cielo.”

Ese es el motivo de nuestro gozo, ese es el motivo de nuestra alegría, y no hay otra cosa que pueda regocijarnos más que saber que nuestro nombre está escrito en el Cielo. Ese es el motivo del gran gozo que tenemos.

Dios les bendiga, Dios les guarde, y sigan gozándose porque sus nombres están escritos en el Cielo. Dejo con ustedes a nuestro hermano Pedro Márquez para que concluya ya en este día, y luego para este día, ya de medio de abajo tendremos algunas actividades que fueron anunciadas por nuestro hermano Miguel Bermúdez.

Así que, en la vida, en todos los aspectos de la vida estamos regocijados, estamos contentos, porque sabemos que nuestros nombres están escritos en el Cielo; así que, todo lo que hacemos aquí en la Tierra lo hacemos con alegría, con regocijo, confiando, creyendo firmemente que obtendremos siempre la victoria porque Dios nos ayudará.

Parece que… ¿no fue que Bermúdez le dijo que se escondiera a Pedrín por ahí? Siempre, pues, es lo que hace nuestro hermano Bermúdez y nuestro hermano Pedrín eso lo aprende rapidito, allá también en Venezuela demostró que lo había aprendido muy bien, pero… yo creo que ya con lo que hemos escuchado tenemos un cuadro claro, un conocimiento claro del motivo de nuestro gozo.

Así que, Dios les bendiga, Dios les guarde, muchas gracias por vuestra amable atención, y será hasta el próximo domingo nuevamente en este lugar. Dios les bendiga a todos.

“EL MOTIVO DE GRANDE GOZO.”

Nota al lector: Es nuestra intención hacer una transcripción fiel y exacta de este Mensaje, tal como fue predicado; por lo tanto, cualquier error en este escrito es estrictamente error de audición, transcripción e impresión y no debe interpretarse como errores del Mensaje. El texto contenido en esta conferencia puede ser verificado con las grabaciones del audio o del video. Este folleto debe ser usado solamente para propósitos personales de estudio hasta que sea publicado formalmente.

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